Churros
Los churros son un pastel frito popular originario de España. Por lo general, se elaboran con una masa simple de harina, agua y sal, que se pasa a través de una boquilla en forma de estrella y se fríe hasta que esté dorada y crujiente. A menudo cubiertos de azúcar o canela, los churros se disfrutan por su interior ligero y aireado y su exterior crujiente.
El sabor de los churros recuerda al de un donut pero con una textura distintiva. Son ligeramente crujientes por fuera, suaves y tiernos por dentro, con un sabor ligeramente dulce realzado por la capa de azúcar. Cuando se combinan con chocolate caliente espeso o dulce de leche, los churros se convierten en una delicia irresistible.
Tradicionalmente, los churros se disfrutan como merienda en el desayuno del domingo en España, y a menudo se sirven con una taza de chocolate caliente espeso para mojar. Esta combinación, conocida como “churros con chocolate”, es especialmente popular durante los meses más fríos. Los churros también se pueden acompañar con café, leche o incluso una copa de jerez dulce o vino de postre.
El origen de los churros es algo debatido, pero se cree que fueron introducidos en Europa por exploradores portugueses que trajeron la idea de China, donde se disfrutaba un pastel similar llamado youtiao. Más tarde, los pastores españoles adoptaron los churros como un alimento conveniente y portátil, ya que la masa simple se podía freír fácilmente a fuego abierto.
Con el tiempo, los churros se convirtieron en una parte muy apreciada de la cocina española y su popularidad se extendió a América Latina y más allá. Hoy en día, los churros se disfrutan en todo el mundo, desde los vendedores ambulantes en México hasta los cafés de moda en los Estados Unidos, y cada región agrega su toque único a este pastel clásico.