La historia detrás de la invención de los jeans
Los jeans son un tipo de pantalón o pantalón producido de mezclilla. Originalmente diseñados para los mineros, los jeans modernos se popularizaron como ropa casual en las películas de la década de 1950, lo que llevó a que la tela se convirtiera en un símbolo de desafío para diversas subculturas juveniles, solidificando los jeans como una pieza por excelencia de la moda occidental.
La etimología de “jeans” tiene sus raíces en las ciudades de Génova, Italia y Nimes, Francia. La palabra francesa para Génova, “Gênes”, dio origen al término “jeans”, mientras que “mezclilla” (“denim” en inglés) se originó en “de Nîmes”, que significa “de Nîmes”. La marina genovesa vestía a los marineros con jeans debido a la versatilidad de la tela en condiciones húmedas y secas, mientras que la mezclilla más tosca de Nîmes, considerada de mayor calidad, encontró uso en prendas como batas y monos. El proceso de teñido, que inicialmente dependía de las plantaciones de índigo en la India, experimentó un cambio hacia métodos de síntesis de índigo desarrollados en Alemania a finales del siglo XIX.
El momento crucial en la historia de los jeans ocurrió en 1873, cuando Levi Strauss y el sastre Jacob Davis unieron fuerzas. Davis propuso reforzar la ropa con remaches, lo que llevó a la emisión de la patente estadounidense número 139.121 para esta innovación. Los remaches de cobre se colocaron estratégicamente para fortalecer los puntos de tensión, lo que marcó un avance significativo en la durabilidad de las prendas de mezclilla. En 1901, Levi Strauss perfeccionó aún más los jeans, introduciendo la ahora estándar configuración de cinco bolsillos.
A medida que los jeans ganaron gran popularidad en los Estados Unidos durante la década de 1970, su evolución continuó. En 1965, la boutique “Limbo” del pueblo del este de Nueva York fue pionera en la práctica de lavar vaqueros nuevos para conseguir un efecto desgastado, iniciando una tendencia. Este minorista emprendedor fue un paso más allá y embelleció los jeans con parches, creando una versión mejorada que obtuvo precios más altos en la reventa.
Hoy en día, América del Norte encabeza las compras mundiales de jeans con un 39%, seguida de Europa Occidental con un 20% y Japón y Corea con un 10%. El resto del mundo representa el 31% restante, lo que demuestra la perdurable y creciente popularidad de los jeans con el paso de los años.