Abbaye de Belval
El queso Abbaye de Belval (a veces también conocido como “Belval aux fleurs“) es originario de la región de Lorena, en el noreste de Francia, y es elaborado meticulosamente por los monjes trapenses en el monasterio Abbaye de Belval. Fundado en el siglo XII, el monasterio ha sido un centro de devoción espiritual y prácticas artesanales.
Utilizando técnicas ancestrales transmitidas de generación en generación, los monjes comenzaron a producir queso junto con sus deberes religiosos. El queso Abbaye de Belval, elaborado con leche de vaca, se somete a añejamiento durante meses, lo que da como resultado una textura suave y cremosa y un rico sabor a nuez con toques de caramelo y mantequilla.
Las flores que puedes ver adornando el queso son flores y hierbas comestibles. Tienen un propósito decorativo y pueden agregar sutiles notas de sabor al queso. Las flores comunes que se usan para adornar el queso incluyen lavanda, pétalos de rosa, flores de cebollino y capuchinas, entre otras. Estas flores se seleccionan por sus sabores delicados y su apariencia atractiva, que realzan la presentación general del queso. Además, pueden ofrecer una experiencia sensorial al brindar un atractivo aromático y visual al plato de queso. Sin embargo, no todos los quesos están adornados con flores y, en última instancia, depende de las preferencias del quesero o del estilo de presentación elegido para un queso en particular.
Para apreciar plenamente los sabores del queso, lo ideal es combinarlo con alimentos y bebidas complementarios:
Comience con pan crujiente para resaltar la textura cremosa del queso u opte por frutas maduras como manzanas o peras para lograr un contraste dulce. Los frutos secos como las nueces o las almendras aportan textura y profundidad a la experiencia de degustación.
Para una tabla de quesos gourmet, incluya carnes curadas como prosciutto o salami, que complementan las notas sabrosas del queso. Rociar miel sobre el queso realza su dulzura, creando una combinación lujosa.
Cuando se trata de bebidas, los vinos tintos de cuerpo medio como Pinot Noir o Merlot complementan los sabores del queso. Alternativamente, las cervezas de estilo belga o las saisons de granja ofrecen un contraste refrescante, lo que crea una combinación deliciosa.
Estas combinaciones realzan las cualidades únicas del queso Abbaye de Belval, brindando una experiencia culinaria sofisticada y satisfactoria. Experimentar con diferentes combinaciones permite descubrir las armonías de sabores favoritas, enriqueciendo el disfrute de este apreciado queso.